Las primeras experiencias en la infancia marcan el rumbo de nuestra vida y la visión que tenemos de ella. Los cambios que se producen a lo largo de la infancia y adolescencia determinan en gran medida la salud y el bienestar del resto de la vida.
Afortunadamente, en la actualidad cada vez se tiene más en cuenta la importancia de la detección y prevención de las alteraciones psicológicas en la infancia, para facilitar un desarrollo equilibrado de la personalidad.
La terapia infanto-juvenil hace referencia a las técnicas y métodos usados para poder ayudar a los niños que tienen problemas o dificultades con su comportamiento y sus emociones. Se aborda desde una perspectiva integradora, teniendo en cuenta el momento evolutivo de la persona y su edad